miércoles, 8 de agosto de 2012

SÉ QUE EXISTE Y BASTA SU SEMILLA. Por Flóbert Zapata Arias


Hoy al almuerzo Alejo me comentó que ganó oro un atleta que lee cien libros por año, lo vio por ESPN, no recordaba en qué deporte preciso pero uno de lanzamiento.  


Buscando me encuentro al polaco Tomasz Majewski, medalla de oro en lanzamiento de peso, pero nada de que lee. Sin embargo destaco su larga y gallarda cabellera en la foto de wikipedia, como la de Iván Ukhov, oro en la prueba de salto alto de atletismo. Vi la alegría del tatuaje en los pies de una competidora, fugaz en la pantalla como el relámpago innevitable.


Sigo buscando. Después de media hora doy con Yannick Agnel, un nadador francés que ha ganado dos medallas de oro,  de filiación poco común: le gusta leer. Libros que destaca: Cien años de Soledad, de Gabriel García Márquez y Las flores del mal, de Baudelaire. Cita con propiedad clásicos franceses, entre ellos Montesquieu. Antes de zambullirse en Londres publica en facebook un poema de la condesa Anna de Noailles. La poesía no es para los débiles, la poesía nos hace fuertes.


Culturalmente se ha creado una disyuntiva: el que va al gimnasio se enorgullece de no leer y se considera frívolo que un intelectual gaste el tiempo de crear en sacar músculos. Muy citada al respecto la frase Saramago: “Todo el mundo me dice que tengo que hacer ejercicio. Que es bueno para mi salud. Pero nunca he escuchado a nadie que le diga a un deportista: tienes que leer”.


Yannick  Agnel, de dos metros y veinte años, nos enseña que hay que darle oro al cuerpo sin dejar de darle oro a la inteligencia.


Estuve por la retícula buscando un poema de Anna de Noailles traducido al español y no hay ninguno. Empezará a haberlos como empezará un tiempo en el que la gente saque tiempo para leer.


Sigo buscando al atleta que lee cien libros por año, tal vez no lo encuentre pero sé que existe y basta su semilla.


La Carolita, domingo 5 de agosto del 2012.

©Flóbert Zapata Arias, agosto del 2012