sábado, 4 de agosto de 2012

EN CASA DE NORMA. Por Flóbert Zapata Arias


1
La casa de Irene y la casa de Norma,  las dos casas más bonitas que conozco. Las dos casas que me atraen, que me dan amor siempre, que nunca me lo niegan. Afortunadamente Casas de Irene hay en todas partes, desafortunadamente casas de Norma sólo una, en Filadelfia, el pueblo donde crecimos, al que volvió. Cómo lloró mi hermanita la muerte de Gian Franco Pagliaro. Cómo recuerdo la versión suya de la canción de su paisano Nico Fidenco: “En casa de Irene se canta y se ríe, hay gente que viene, hay gente que va”.   Pero mucho más admiro Dedicado a Verónica: “Los oídos se habían vuelto sordos, los ojos ciegos, los cantores mudos y los corazones negros”.

2
Pedro, le pide a su esposa que, cuando le llegue la hora, no lo entierre en San Camilo (cementerio de Pereira, donde reside) porque por allá atracan ni en el que queda por el aeropuerto porque lo despierta el ruido de las turbinas ni en el de la zona de los moteles porque le molesta el traquido apasionado de las camas. Que en la Catedral.
─A mí en la catedral del polvo, primo, bien cerquita, que los gemidos y los jadeos de los amantes se escuchen nítidos, ojalá un parlantico ─le digo ─jajajajajajaja─.

3
─¿Cuánto hace que se murió doña Morelia Barco, un año?
─No, un mes ─me responde Norma.
─¿Por qué?
─Me conmovió algo que me contaron sobre su último deseo.
─Ah, sí, antes de morir pidió que colocaran en su lápida la inscripción Fue la mujer más liberal de Filadelfia.

4
Pedro: Cuando sacamos a mi mamá estaba entera, por tanto medicamento que tomó. Y nos dice el sepulturero: “”Hay que boliarle serrucho y machete”.
(No había de otra, por lo que autorizaron al sepulturero mientras se retiraban para no ver).
−Nosotros somos los únicos hijueputas que pagamos para que le den machete a la madre –comentó Néstor.
(Pienso en mi hermano Henry, muerto de infarto el 13 de julio del 2011.  No cruzará semejante trance por haber muerto de repente y sin enfermedad a la vista. Los hombres le entregamos dolor e hipocresía a la vida, la vida devuelve consuelos). 
Filadelfia, domingo 23 de octubre del 2011. 

Copyright © Flóbert Zapata, agosto 2012