viernes, 7 de noviembre de 2014
Esas horas. Por Flobert Zapata
(Las alegres tabernas
del halloween bogotano en Galerías, localidad Chapinero)
El mundo está poblado
por muertos, pero los más muertos de todos los hombres somos los poetas.
Algunos poetas se rebelan, dicen lo que piensan y sienten, hablan de sí mismos
para suprimir toda mentira, toda vanidad y todo odio y se convierten por ello
en muertos matados, más altos que los otros, más altos que lo que ellos mismos
eran antes, como una palmera es más alta que el pasto. Pero conocieron la mayor
de las dichas y la más breve, la dicha de salir por unas horas al año del
silencio y el miedo. Unas horas solamente porque entonces hubieran sido muertos
no nacidos. Esas horas nos hacen saber lo que diferencia a un versificador de
un poeta o a un poeta normal de un gran poeta y nos dicen que poesía es lo que
le falta al hombre para caer matado y que poeta es el menos muerto de los
hombres.
Manizales, viernes 7/noviembre/
2014
© Flóbert Zapata, noviembre de 2014