miércoles, 31 de octubre de 2012

LOS CORAZONES CERRADOS. Por Flóbert Zapata Arias


LOS CORAZONES CERRADOS

Ahora sí vayan, ahora sí exprésense bien de él, ahora sí digan que su obra merecía unas cenizas distintas. 
Ya sin el peso del recelo, de la reticencia, del escarmiento, del miedo, reséñenlo al fin movidos por la misma ceguera que la de un viejo cuando ve un cuerpo joven desnudo, en ese momento en el que se le activan todos los recuerdos con tanta violencia que no puede distinguir a ninguno.
Reconozcan la lucidez y originalidad de sus últimos años como las de ustedes al principio, diacronía que los separaba, o dicho de otra manera, ustedes encontraron la poesía y él la tomó cuando la tuvieron que abandonar.
Lloren, lloren, que al hacerlo lo hacen por ustedes mismos, que también abren su corazón para que reciba las respuestas de los corazones cerrados.
Flóbert Zapata Arias
La Carolita, 9:27 p.m., miércoles 31 de octubre de 2012.
©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

BITÁCORA DE VIAJE. Por Flóbert Zapata Arias

BITÁCORA DE VIAJE  
Y lo que más recuerdo del infierno
es que no había ni un solo demonio
que no escribiera versos.
Flóbert Zapata

MUSSOLINITOS DE PAISANO. Por Flóbert Zapata Arias

Miércoles 24 de octubre del 2012. Ocho de la noche. Mientras espero que a mi hija le traten un sádico espasmo opresivo-pulmonar de gestante de diecinueve semanas, una pobre señora, exempleada de los Seguros Sociales espera a que le apliquen una droga en Urgencias del Hospital de Caldas. Vientre hinchado, como de gestante de diecinueve semanas, hemorragia vaginal que casi la desangró, desconsuelo porque el médico le dijo que eso era normal. Nos ponemos a hablar de la alimentación. De la tartrazina, de los químicos de los alimentos procesados. De la frase de Hipócrates: Que tu alimento sea tu medicina. De que no nos  morimos sino que nos matamos con lo que comemos. De los agrotóxicos, de la agricultura orgánica. De la quimioterapia natural que logra la bebida de la cáscara o la hoja de la guanábana y la pulpa pero de su inconveniencia en hemorragias por su poder de dilatar los vasos sanguíneos. Del yoga y la meditación. Sí, practicaba meditación, hasta que una vecina le preguntó si no le daba miedo que se le metiera un espíritu. Enconces dejó de meditar y, según me contó, ¡qué bien lo hacía! La superstición tiene sus lugartenientes. El fascismo menudo de la cotidianidad mata cuando se ausenta el fascismo gigante de las líneas de trinchera. Todo Mussolini uniformado tiene sus Mussolinitos de paisano.
 
 
La Carolita. Jueves 25 de octubre del 2012.
©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

martes, 30 de octubre de 2012

MALDIGO EL SISTEMA DE SALUD COLOMBIANO. Por Flóbert Zapata Arias



NO APARECE EN PANTALLA
Mi hija Carolina está afiliada a Cafesalud. Pero en la propia Café Salud no la atienden sin firmar un pagaré, porque no aparece en pantalla como afiliada, aunque ha realizado los pagos correspondientes en Cornabis. Aparte de eso la atención resulta deficiente, un médico general bonachón y voluntarioso hace llamadas telefónicas a un ginecólogo para ver hacia dónde va con un leve sangrado vaginal de Carolina, que tiene cuatro meses de embarazo. Le mandan una ecografía para fecha no cercana. Resolvemos el asunto en consulta particular con el ginecólogo de Santillana. Durante las semanas siguientes vamos a Cornabis donde Pilar, vamos a Cafesalud donde Alex, volvemos a Cornabis, volvemos a Cafesalud, nada, llevamos y traemos tal o cual papel, fotocopiado u original, nada, Carolina sigue sin aparecer en pantalla como afiliada. Impotencia total. Laberinto depravado. Rostros como muros.

DEL PROPIO BOLSILLO
En el Hospital de Caldas, antiguo hospital del pueblo, nos atienden en consulta privada las dos siguientes emergencias, un flujo de líquido primero, que finalmente no significó ruptura de membranas, lo que llaman romper fuente, y a los días un doloroso y asfixiante espasmo a la altura de las costillas. El embarazo no es una enfemedad pero es peor que una enfermedad, dicen las mujeres y ninguna lo niega. Muchas gracias Hospital de Caldas, salí del paso, me tocó pagar de mi bolsillo pero salí del paso, después de que en La Presentación dijeran que no atienden gestantes. El vigilante de La presentación se comportaba rígido como un vigilante de Banco, la mujer que me atendió se comportaba rígida como una cajera de Banco, completamente coherentes con lo que han convertido a la salud, en una grosera transacción económica, en un camino al desamparo y la incertidumbre, en nuevo estuario de penas y preocupaciones, como si no nos agobiaran ya demasiadas.

NO SERÍA CANDIDATA
En las idas al Hospital de Caldas veo un aviso: “Cliente preferencial. Atención personalizada. Llame al 313-7166969”. Atenderían a Carolina en el quinto piso, donde están los especialistas, la tecnología de punta y las comodidades. ¿De qué se trata eso de tarjetas oro, plata y platino? Gastaré mis ahorros con tal de que esté bien. Después de saber que Carolina está afiliada a Café-Salud María Isabel Salazar, la encargada, me responde: “No señor, Carolina no sería candidata a ninguna de las tarjetas, para poder acceder a ellas tendría que tener medicina prepagada o póliza”. “¿Y si afilio a Carolina a medicina prepagada o le pago una póliza si tengo acceso a las tarjetas?”, le pregunto. Este el siguiente eslabón de oscuridad: “Yo entiendo que ninguna prepagada afilia a embarazadas. Las pólizas tampoco las aceptan”. Sentiré esa hiel. Probaré de esa hiel. Me untaré de esa hiel. Hundiré este cuerpo y esta mente en esa hiel como en una piscina.

NO ME IMPORTA SU ESPERANZA
Andrés Felipe Álvarez, de Coomeva, me atiende. Voy al grano: “Andrés Felipe, quiero afiliar a medicina prepagada Coomeva a mi hija Carolina, que tiene veintisiete años y cinco meses de embarazo”. Esta su respuesta: “Desafortunadamente, como ya está en embarazo, no puede ingresar a medicina prepagada hasta no tener el bebé. En Coomeva medicina prepagada no se acepta sino antes o después del embarazo. Las personas que se van a afiliar se afilian un mes antes”. De cooperativa les queda el nombre. Mi hija no se afilió antes por una razón poderosa, no sabía que estaba en embarazo. Una anterior cirugía ginecológica le había negado casi toda esperanza de procrear, se preparaba para la adopción. La noticia lo convirtió todo en fiesta y esperanza. Pero ahí estaba el sistema de salud colombiano para traer la tristeza y la desesperanza. Digámoslo resumido: La mujer corriente que se embaraza comete un delito contra la propiedad privada.

NO LA RECIBEN EN LA PROPIA CASA
Suponemos tontamente que en Café-Salud haya alguna esperanza de afiliar a Carolina en medicina prepagada, dado que a esa entidad pertenece. Pero el hecho de que pertenezca a Café-Salud no significa absolutamente nada. La respuesta que me entregan suena calcada de la que me dieron en Coomeva, sólo cambió la voz: “No se puede afiliar a medicina prepagada si está en embarazo y en ninguna otra empresa la aceptan”. Qué amarga esta hiel, más amarga que todas las hieles que han existido, todos los científicos reunidos no podrían inventar una hiel más amarga. Pero quiero un poco más de hiel, el de la incomunicación. Llamo a Colmédica, que encontré en las páginas amarillas. 018000-123700. La voz grabada “Bienvenido a Colmédica medicina prepagada. Por favor digite su número de identificación”. Digito mi cédula.“Si usted aun no es usuario de Colmédica y desea afiliarse a medicina prepagada marque uno”. Marco el uno y la llamada se corta, lo intenté no menos de diez veces a distintas horas, distintos días.

NI AUNQUE TENGA UN MES DE EMBARAZO
Sura no maneja medicina prepagada sino pólizas. Nos haremos a una. La póliza full, me informa Sandra Cardona, en caso de cirugía, accidente o tratamiento hospitalario, cubre insumos médicos, gastos de especialistas, consulta ilimitada, atención inmediata y preferencial en las clínicas Santillana, La Presentación y Santa Sofía. Discriminatoria, para una persona de cincuenta años cuesta $2.274.333 anuales. Para una persona de veinticuatro años cuesta $1.057.358 anuales.
−Necesito una póliza para mi hija Carolina, está embarazada de cinco meses.
−No señor, en el momento no podemos venderle la póliza.
−¿Por qué?
−Porque al estar en embarazo tiene riesgo alto.
¿Por ningún dinero?
−Por ningún dinero.
−¿Ni aunque tenga un mes de embarazo?
−Ni aunque tenga un mes.

MALDIGO EL SISTEMA DE SALUD COLOMBIANO
Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Inglaterra.Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Francia. Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Ecuador. Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Cuba. Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Venezuela. Lo maldigo por no ser universal y gratuito como el de Canadá. Lo maldigo por ser una copia esclava del inhumano y fetichista sistema de salud de los Estados Unidos, que arroja a los pobres en las aceras. Lo maldigo porque es un sistema deshumanizado en su totalidad. Lo maldigo porque los pacientes se mueren en los corredores de los hospitales, o anhelando una droga o esperando una consulta en sus casas. Lo maldigo porque le interesa que la gente se enferme. Lo maldigo porque es un bazar turco, una subasta, un mercado persa, un comercio formal. Lo maldigo porque inventó la enfermedad del miedo a enfermarse para no tener que encontrarse a su merced.
http://tu.tv/videos/sicko-2007-v-o-sub-espa-1-de-2
 

Manizales,lunes 29 de octubre del 2012.

©Flóbert Zapata Arias, octubre de 2012

domingo, 28 de octubre de 2012

ASÍ FUERON LAS LECTURAS URGENTES DE POESÍA DEL 28-10-12. Por Flóbert Zapata Arias


Me corto la barba y las uñas. Me ducho, lavo el cabello con jabón Rey para quitar el amarillo de las canas producido por la oxidación. Me visto de negro para el contraste con la calavera que la flaca me pintará en el alma superficial. Voy al encuentro del poema, ese ser bisexual, por hacer el amor con toda la vida y no sólo con la mitad. Salgo para la Fundación Fellini, Lecturas Urgentes de Poesía a las 6.30. Los poetas empezamos a saludarnos, el primer paso para que nos escuchemos y dejemos de comportarnos como esos vecinos que nunca se saludan y si se saludan no se visitan. ¿Se quiere mejor definición de enemigo que esta conducta? Y los poetas, que no podemos caer en tal desnaturalización, empezamos a salir de ella. Una fiesta feliz con lugar para la diversidad de las voces, gracias de todos para todos. Nos vemos el sábado 24 de noviembre en la última sesión de LUP del 2012. Carpe diem.

La Carolita, domingo 28 de octubre de 2012.
©Flóbert Zapata Arias, octubre de 2012

                                           
 (Fundación Fellini)
 (Fundación Fellini)
 (Teresa González)
 (Alcy Doney Calle)
(Juana María Echeverri Escobar) 
 (Rubén Darío Sepúlveda)
 (Toma general)
 (Vanessa Marulanda Cardona)
 (Carlos Mario Uribe)
 (Ibán de Jesús Alarcón Marín)
 (Carlos Andrés Franco)
 (Joan Henao)
 (Daniel García)
 (Alexánder Ramírez)
 (Jean Paul Saumon)
 (Carlos Mario Vallejo)
 (Jehú Londoño, presentando Lomo de gato, su primera publicación)
 (Ana Krank)
 (Catalina Solano)
(Paula Rincón) 
 (Estefanía Rodríguez)
(Mauricio Garay) 
 (Víctor Nillos)
 (Shoko Gómez)
 (Juan David Contreras)
 (Jeison Steven Hurtado)
(Onel López Vasco) 
(El afiche)

jueves, 25 de octubre de 2012

POEMA CON POSDATA. Por flóbert Zapata Arias

QUÉ VOY A HACER. Por Flóbert Zapata Arias

Qué voy a hacer si no soy hermoso. Qué voy a hacer si no soy joven. Mal dicho, corrijo. Qué voy a hacer si no soy hermoso porque no soy joven. Qué voy a hacer. Qué voy a hacer si eres hermosa y eres joven. Qué voy a hacer si por viejo te veo dos veces hermosa y dos veces joven. Qué voy a hacer. Qué voy a hacer si por verte dos veces joven y dos veces hermosa me veo dos veces feo y dos veces viejo. Qué voy a hacer. Yo no creía en el infierno, helo aqui, no cabe duda, quema, se burla de las quemaduras, quema y quema, eternamente. Y creo por consiguiente en el cielo, lejano, inalcanzable, que también se burla, no para de echarle kerosén al fuego de la burla, no me oye, me esquiva, se aleja, calla, se diluye, desaparece, me quiere hacer creer que alucino, me dice que no tengo ningún derecho a él. Qué voy a hacer. Sentarme a meditar sobre el cielo y el infierno. Que el cielo queda donde quedaba el infierno y el infierno queda donde quedaba el cielo. Que el cielo queda donde quedaba el infierno y el infierno nadie sabe donde queda. Que el cielo queda donde quedaba el infierno y el infierno no queda en ninguna parte. Que el infierno no queda donde quedaba el cielo sino en otra parte y el cielo no queda donde quedaba el infierno sino en otra parte. Que el infierno no queda dond… Qué voy a hacer. Qué voy a hacer. Apreciar pura la belleza mata y sólo se aprecia en la vejez. Gracias vejez pero qué voy a hacer. Qué voy a hacer.  

*

POSDATA

Este blog me ayudó a vivir la poesía como el periodismo, no siempre pero cuando quiero, a publicar el poema el mismo día de escrito, a no temerle a la inmediatez, a desbaratar el mito del añejamiento, bien en la enología. Y conste que no hablo de futilidades, liberarse de esta obligación te manda a la hoguera, te convierte en apóstata. Claro que no todo el mérito le pertenece, hizo su parte la vejez, el temor de que no haya tiempo, de morir y que se  queden las cosas guardadas, listas para fermentarse paralelamente con la marioneta sin hilos. ¿Y quién garantiza que no ocurra esta noche mientras duermes?, a tantos les ha pasado. No se trata de pesimismo, ¿no murió Arcesio Zapata a principio de año?, ¿no murió mi segundo hermano el año pasado?, ¿no murió…?, ¿no han muerto tantos? Hagan la lista de sus muertos y verán la consternación poseyéndolos. La calma no consiste más que en uno de los tantos huecos de la memoria. Y conste que quiero vivir cien años, que me gusta vivir, que me amaño viviendo, que sueña el bastón con mi mano. Decir a quien nos pide un poema para publicar que espere le escribimos enseguida uno produce nauseas pero escribir uno a las siete y publicarlo a las nueve ingresa a los fenómenos de la normalidad con la nube. Si no me convenzo, queda el recurso de la locura. O de la excentricidad barata. Si el pecado  vence a la angustia voy a temblar y qué voy a hacer. Qué voy a hacer.
  
La Carolita, jueves venticinco de octubre del 12.
 
©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

EL DEMONIO, DOÑA VIRGELINA. Por Flóbert Zapata Arias


¿Dónde vamos a meter tanto indigente, doña Virgelina? En el corazón, doña Yolanda. No, en el corazón caben nomás unos poquitos. Entonces en la mente. No me acordaba, allá caben todos, doña Virgelina. Y sobra espacio, doña Yolanda. ¿Cuántos son, nueve mil? Póngale más. ¿Noventa mil? ¡Ojalá, doña Virgelina! ¿Novecientos mil? Póngale otro cero. ¿Nueve millones, doña Yolanda? Sí. ¿Tanto cero escarbando las basuras, durmiendo en la calle y pidiendo limosna? Sí, doña Virgelina. ¿Y  quién hace tanto cero, doña Yolanda? El demonio, doña Virgelina, el demonio, por eso tenemos que pedirle mucho a midiosito. Así es, doña Yolanda.

 
(Fotografía: En la 23 de Manizales con uno de los nueve millones de hermanos indigentes colombianos).
©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

martes, 23 de octubre de 2012

VEN A LA FIESTA DE LA POESÍA.Por Flóbert Zapata Arias




Ven a la fiesta de la poesía en Manizales.
Te esperamos transeúnte de la palabra.
Entrada gratuita al poema,
ese lugar donde todos
somos amigos sin conocernos.

domingo, 21 de octubre de 2012

MAL DÍA PARA EL EGO EN FACEBOOK. Por Flóbert Zapata Arias


Entro a facebook a ver si alguien alimentó mi ego.

Pero nada, ni un solo Me gusta en la publicación del muro ni una solicitud de amigo ni un mensaje.

Pobre ego, si se lo encargo a los otros me lo dejan morir de hambre y de frío, no les interesan sino sus propios egos, sus mascotas que los gobiernan.

Pero mi ego me tiene a mí, le doy alimentos caros, dejo que me transmita sus bacterias inconcretas, lo quiero como a un hijo.

Sin embargo no se sacia, está obeso, aceza después de dos pasos, se me va a morir reventado.

Y si me deja me vuelvo humano, dejo de ser dios, pierde todo sentido mi existencia.

¿Los egos se suicidan? Nada raro en estos tiempos oscuros y sucios en los que por una opinión divergente lo borran a uno de la lista o lo ocultan.

Tendré cuidado. 

 (Fotografía: Arte urbano, Manizales)

Domingo 21 de octubre del 2012

©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

TIENE RAZÓN SCHOPENHAER.Por Flóbert Zapata Arias





 

La demencia ungida con sangre se fatiga y se toma un descanso, lo llaman paz, la hora de la demencia por dosis y cirugías, que también se fatiga y vuelve al nativismo. Una guerra grande se cambia por una multitud de guerras pequeñas, cotidianas, que tienen su mejor expresión en la envidia de los maniáticos, el egoísmo, la exclusión de los débiles, la rapiña burocrática, la calumnia, la hipocresía sin tasa, la traición, el despojo  espiritual, la competencia, la poesía rosa, la represión a las minorías buenas, el odio a lo distinto, la ojeriza a la diversidad, la insidia, el chisme, la conspiración de vecinos o de colegas y el arrinconamiento de los inocentes, lo que llamamos justicia, en resumen el sadomasoquismo de bluyín, una destrucción con otras armas,  más azarosa que las trincheras, putrefactas y alquitranadas las mentes como nunca por la pesadez, el desfallecimiento y la decepción: la historia menuda de Occidente. Tiene razón Schopenhauer en La muerte.

 


 

 

(Fotografía: Arte urbano, Manizales)

La Carolita, viernes 19 de octubre del 2012

 

©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

sábado, 20 de octubre de 2012

DICE OSHO. Por flóbert Zapata Arias


Dice Osho que las personas capaces de mayor crueldad son las personas más religiosas. Digo que las personas crueles encuentran en las religiones un campo inigualable para desarrollar su crueldad. Cuando padecí en carne propia este laberinto de aspilleras sufrí una de las grandes decepciones de mi vida, comparable sólo al hallazgo del mayor sufrimiento humano, el de seres monógamos desprovistos de alas para volar, más perniciosos que los solos incapaces de amarse. En cambio los buenos no encuentran en ellas la forma de derrotar a los crueles y terminan sucumbiendo hasta hacerse sus  conmilitones, los perfumadores de las fístulas que aspiran complacidos. Estos los dos tipos de personas religiosas que conozco de acuerdo a la experiencia vivida.  Quisiera conocer los otros. ¿Existen? Tendrán esencia de lluvia, de mar, de atardeceres, de árbol nunca fumigado, de fruto que sólo se muestra al que tiene hambre y no busca  fortuna ni produce recuerdos.

 

La Carolita, viernes 19 de octubre del 2012

 

©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

viernes, 19 de octubre de 2012

EL ÁRBOL. Por Flóbert Zapata Arias





 


Si vas solo y hay un árbol solo abraza su tallo cuanto quieras.

Si vas solo y hay cinco árboles no abraces a uno solo, no dejes a los otros esperando.

Si vas solo y hay mil árboles pídele perdón a los que no alcanzas a abrazar y promételes que algún día volverás a buscarlos.

Si vas acompañado y hay un solo árbol, abrázalo por un momento y permítele a los otros abrazarlo. Nunca digas esta atrocidad: Es mío,  yo lo vi primero, nadie me lo toca.

Si vas con un grupo de diez personas y hay diez árboles, que cada uno abrace a uno y que luego intercambien en serena orgía.

Que nadie se quede con hambre de abrazos, que nadie robe abrazos, que nadie niegue abrazos, pues muere el corazón sin estaciones, sin cambios, sin  adioses.

Que pronto serán rescatados por sus mundos fríos, donde las únicas estaciones son las de los trenes cargados de confusión, amantes de la movilidad material y esposos de la movilidad espiritual, arraigados en un solo adiós perpetuo.

 
(Fotografía: Talla en madera, Centro Comercial Parque Caldas).
 

©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

martes, 16 de octubre de 2012

TE MIENTEN. Por Flóbert Zapata Arias







TE MIENTEN

Te mienten porque esperas que te mientan.

Te mientes porque ya no esperas nada.

Les mientes porque al fin les perteneces.

Flóbert Zapata Arias



©Flóbert Zapata Arias, octubre del 2012

EL BUEY. Por Flóbert Zapata Arias

(Escultura en madera. Centro Comercial Parque Caldas)

Mi vida es un buey con heridas de nacimiento, a las que sobrellevo con los antibióticos de la poesía.

Mi vida es un buey con pesados fardos, que me doblan el alma, que ignoro por qué cargo.

Mi vida es un buey que huye cuando puede y camina hacia atrás para despistar a sus jefes.

Mi vida es un buen a cuyos intentos de comunicarse con bramidos los llaman perversión.

Mi vida es un buey dócil que cuando le cortan el breve descanso insuficiente se encabrita y cocea iracundo.

Mi vida es un buey al que inadecuados pH y color, debidos al estrés severo,  hacen su desnaturalizada carne no apta para consumo humano pero apetitosa para el águila harpía.

Mi vida es un buey al que le enseñan a comer carne de buey.

Mi vida es un buen que no se queja del yugo y cuando menos piensa se desploma y muere.

 

La Carolita, lunes 1 de octubre del 2012.

©Flóbert Zapata Arias, ocutubre del 2012